A una profundidad de casi 2 mil metros, vive la única especie que es capaz de regenerar sus órganos, aunque esté completamente despedazada: el Polycarpa mytiligera.

Su hábitat está entre el golfo de Eilat que separa la península del Sinaí de la arábiga. Ahí, la vía preferida de comunicación entre ambos territorios es el Mar Rojo. Se trata de la primera vez que un grupo de científicos es capaz de regenerar su cuerpo desde cero, es decir, aunque se encuentre completamente en pedazos.

El hallazgo se hizo por la Universidad de Tel Aviv y fue publicado en la revista científica Frontiers in Cell and Developmental Biology.

Esta especie del golfo de Eilat, tiene la asombrosa capacidad de regenerar todos sus órganos, sin excepción, esta es su gran característica tan extraordinaria.

Se trata de un animal el cual es sumamente difícil de distinguir de entre los corales y las rocas; su apariencia es sumamente similar, así que también se trata de una de las especies con habilidades de camuflaje más notables.

“La capacidad de regenerar órganos es común en el reino animal […]. Aquí encontramos un cordado que puede regenerar todos sus órganos incluso si se separa en tres partes, y cada una sabe exactamente cómo recuperar el funcionamiento de todos sus sistemas corporales faltantes en un corto período de tiempo “, dijo a National Geographic Noa Shenkar, profesor especialista en regeneración de órganos.

Y aunque existen otros animales que pueden regenerar sus órganos, este puede hacerlo completamente y aún si carece de sistema nervioso:

“Dentro del cuerpo hay un órgano central que se asemeja a un colador de pasta. La ascidia succiona agua a través del punto de entrada del cuerpo, el colador filtra las partículas de comida que quedan en el cuerpo y el agua limpia sale por el punto de salida. Entre los invertebrados, se considera que son los más cercanos a los humanos desde un punto de vista evolutivo “, dijo Tal Gordon, un experto que incluyó en su tesis este tema.

Y concluye:

“Nunca antes se había descubierto tal capacidad regenerativa entre una especie solitaria que se reproduce sexualmente, en ningún lugar del mundo”, dice Gordon. Podría ser, según los expertos, que esta capacidad ayude a la investigación médica humana para reconocer nuevos mecanismos para sanar órganos dañados.

Foto: xatakaciencia