Un equipo de investigadores de la Universidad de Leiden registró por primera vez cómo un miembro de la especie in fraganti puede decir palabras imitando a los humanos. Como sabrás, este comportamiento ya se había registrado en especies como las cacatúas, loros e incluso en algunos tipos de urracas, pero es la primera vez que se registra con los patos australianos.

Ahora, lo más cómico es que el registro que se consiguió, muestra a Ripper, un pato australiano que no sólo dice groserías, también imita sonidos de puertas, según reporta National Geographic.

Para los investigadores, la clave de que esta especie consiga hacer esto está en sus vocalizaciones reproductivas. Sobre este tema, los etólogos Carel ten Cate y Peter Fullagar explican en un artículo para Proceedings of the Royal Society B que «La adquisición de vocalizaciones aprendiéndolas de otros individuos solo se conoce de un número limitado de grupos de animales«

Hay que aclarar que hasta ahora este comportamiento en los patos australianos ha sido observado únicamente en las aves que están en cautiverio, las cuales y según los investigadores,  desarrollan mecanismos neuronales y conductuales que se adaptan a sus condiciones de vida ya que dependen de los humanos para vivir en estos contextos.

¿Fascinante, no?