Las Dalias (Dahlia spp.) son originarias de México y se consideran un símbolo nacional. Cuando los conquistadores españoles llegaron a tierras mexicanas se quedaron muy sorprendidos de la belleza de esta espléndida flor cultivada por los aztecas. Sin embargo, no fue hasta 1963 que la Dalia fue oficialmente designada como la flor nacional.

Una de las características más asombrosas de la Dalia es su amplia gama de colores y formas. Hay más de 30 especies diferentes y miles de variedades cultivadas, cada una con sus colores únicos y patrones en sus pétalos. Podemos encontrar Dalias en tonos vibrantes de rojo, rosa, amarillo, naranja, morado y blanco, entre otros.

Las formas también varían desde Dalias de pétalos puntiagudos y estrechos hasta Dalias de pétalos redondeados y pompones. Algunas tienen pétalos en espiral, mientras que otras parecen pequeñas estrellas. Esta diversidad ha convertido a las Dalias en una flor altamente valorada para usos ornamentales.

La Dalia está imbuida de significados simbólicos en la cultura mexicana. Representa la elegancia, la dignidad y la belleza eterna. También simboliza la individualidad y la diversidad, ya que cada variedad es única y especial en su forma y color.

Las Dalias son relativamente fáciles de cultivar. Aquí hay algunos consejos para cuidarlas.

1.- Ubicación: Asegúrate de que las Dalias reciban al menos 6 horas de luz solar al día.

2.- Suelo: Un suelo bien drenado y fértil es esencial para un buen crecimiento. Agrega composta o materia orgánica al suelo antes de plantar.

3.- Riego: Mantén el suelo húmedo pero no empapado. Riega regularmente, especialmente en épocas de mucho calor.

4.- Poda: Retira las flores marchitas para estimular la producción continua de flores.

5.- Invierno: Las Dalias son sensibles al frío. Cúbrelas con mantillo o muévelas a un lugar más cálido durante el invierno.