Enumerar los beneficios de los árboles no es fácil, ya que son muchísimos. Y cuando estos seres están agrupados en forma de bosque, su efecto positivo en nuestra calidad de vida y en la del medio ambiente es innegable. Además, hay algunas de sus bondades que no son tan conocidas como la disminución de la contaminación acústica, y por motivo de la celebración del Día Internacional de Concienciación sobre el Problema del Ruido, 29 de abril, te contamos cómo es que estos seres maravillosos nos ayudan a disminuir el ruido.
¿Por qué se le considera al ruido excesivo una manera de contaminación?
La contaminación acústica es el exceso de sonido que altera las condiciones normales del ambiente en una determinada zona. Sus efectos son nocivos, pues producen secuelas negativas en la salud auditiva, física y mental de los seres vivos.
Ahora, en la naturaleza, en condiciones normales (exceptuando las catrástrofes naturales, por ejemplo), rara vez hay exceso de sonido. Es por ello que la contaminación acústica está casi siempre ligada a las actividades humanas, y por ende, las urbes son el nido perfecto para la proliferación de este tipo de mal para la sociedad.
¿Cómo disminuyen los árboles la contaminación auditiva?
La naturaleza al interior de las ciudades, no solo provee de un mejor clima, propicia la absorción del agua a los mantos friáticos, limpia el aire, o nos hace más felices; también los bosques o parques urbanos constituyen barreras naturales de ruido. Según datos de Muy Interesante, los árboles amortiguan el ruido, entre otras, por las siguientes razones: